La palabra “doctrina” produce una gran incomodidad en el cristianismo ya que muchos la asocian a; legalismo, una manera impuesta de hacer las cosas. Pero si analizamos su verdadero significado nos podemos dar cuenta que “doctrina” se refiere a: aquello que se enseña, el acto de enseñar, de dar instrucción, del griego didaque (διδαχή). Pero como seguidores del Mesías (el Cristo), entendemos que no se trata de cualquier instrucción, sino las instrucciones de nuestro Señor y Salvador, Jesús.

Por lo tanto debemos plantearnos la siguiente pregunta: ¿Cuál es la doctrina de Jesús?, ¿cuales son sus instrucciones?, lo que el quiere que obedezcamos, lo que el preparó para nosotros, sus hijos. Veamos si Jesús alguna vez nos hablo de su doctrina:

• Mateo dice:

7:28: “Cuando terminó Jesús estas palabras, la gente estaba admirada de su doctrina”

22:33: “Al oír esto, la gente se admiraba de su doctrina.”

• En Marcos está escrito :

1:22: “Y se admiraban de su doctrina, porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.”

11:18: “Lo oyeron los escribas y los principales sacerdotes, y buscaban cómo matarlo, porque le tenían miedo, por cuanto todo el pueblo estaba admirado de su doctrina.”

• Lucas confirma:

4:2: “y se admiraban de su doctrina, porque su palabra tenía autoridad.”

• Pero es en el libro de Juan donde se nos aclara cual es la doctrina del Señor:

Juan 7:16-17 “Jesús les respondió y dijo: --Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió.El que quiera hacer la voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios o si yo hablo por mi propia cuenta.”

Los que se consideran cristianos neotestamentario, lamentablemente no han entendido que lo que vino a hacer nuestro Señor es enseñar el Antiguo Testamento, adoctrinarnos en la Torá, interpretar a los profetas y confirmar el nuevo pacto con su pueblo. Cuando decimos que debemos obedecer a Dios, es decir, hacer su voluntad, ¡a que mandamientos nos referimos!, ¡que es lo que hay que obedecer… la respuesta es muy simple: La doctrina de Dios (Jesús).

Para conocer la doctrina de Jesús debemos conocer la doctrina del Padre y aunque sabemos que Jesús es Dios mismo, El no vino a enseñar nada ajeno a lo que estaba escrito, sino que vino a cumplir el Antiguo Testamento, a interpretar correctamente lo que Dios, Jesús y el Espíritu de Santidad siempre quisieron enseñar en su pueblo.

"No penséis que he venido a abolir la Ley o los Profetas; no he venido a abolir, sino a cumplir,” (Mateo 5:17)

Es así como los evangelios adquieren un nuevo significado, ya que si no aceptamos el A.T como doctrina para nosotros, no podremos entender la doctrina del Señor y viviremos dependiendo de lo que los hombres nos enseñan como doctrina.

En esta serie de estudios podremos comprender la “Doctrina del Nuevo Pacto” comparando lo que los hombres han dicho con lo que Jesús estableció.

Bendiciones

Matias Hassan